Kuki también significa en japonés té de tallo y cha. La planta de té protege sus brotes jóvenes contra los insectos al hacer teína. Además, Kukicha tiene una alta concentración de L-teanina, que se produce en las raíces antes de subir hacia las hojas a través de la red de tallos y nervios. Por otro lado, su contenido de teína es bajo, lo que le convierte en un té dulce, suave y no muy amargo.