ML. | 100 |
Bio | Si |
*Cannabis sativa seed oil, Cera Alba, Olea europea fruit oil, Glycine Soja Oil, Prunus Amygdalus Dulcis Oil, Cannabidiol, *Rosmarinus Officinalis Leaf Oil, *Mentha Piperita Oil, Tocopheryl acetate , **limonene, **linalool **citral. *Ingredientes Ecologicos **Componentes naturales de los aceites esenciales
Especialmente formulado para aplicar en zonas concretas también pudiéndose utilizar para masajes de todo el cuerpo. Por las propiedades antiinflamatorias que se le atribuyen al CBD es altamente recomendado para dolores musculares, torceduras, lumbalgia, fibromialgia, codo de tenista, contracturas… certificado cosmetica ecologica certificado cosmetica bio.
La combinación del aceite de cáñamo orgánico con el aceite de almendras, oliva y soja enriquecidos todos ellos con el extracto de cáñamo rico en canabioides ( CBD) nos aportan un alto contenido en ácidos grasos esenciales Omega-3 y Omega-6 que nutren, regeneran, calman e hidratando la piel con su alto poder antioxidante.
Altamente recomendado para friegas y masajes descontracturantes y relajantes por las propiedades calmantes y anti inflamatorias que se le atribuyen al aceite y extracto de cáñamo.
El aceite de cáñamo en cosmética nos aporta a la piel suavidad, elasticidad, luminosidad o fuerza, re hidrata la piel gracias al depósito de la película grasa en la epidermis y suaviza las pieles irritadas, entre muchas de sus propiedades.
El aceite de Cáñamo ( cannabis sativa oil ) es obtenido en frío por presión de las semillas del Cáñamo para conservar todas sus propiedades.
Combina la propiedades mas destacadas en cosmética hidrata fortalece y repara.
El aceite de cáñamo es rico en ácido gamma-linoléico o GLA
Rico en antioxidantes que luchan contra los radicales libres culpables del deterioro de la piel castigada por el estrés diario a la que se la somete con los agentes adversos.
Rico en vitaminas indispensables para la piel en especial la Vitamina E que ayuda a aumentar el flujo sanguíneo y reestructura la epidermis.
El aceite de cáñamo tiene facultades altamente penetrantes, en pocos minutos es absorbido dando la sensación de utilizar un aceite seco. Es ideal para hacer masajes.
No contiene THC.
¿Qué son los cannabinoides?
Los cannabinoides son las moléculas que interaccionan con el sistema endocannabinoide de nuestro organismo uniéndose a nuestros receptores cannabinoides y modulando algunas de sus funciones. Pueden ser de 3 tipos:
Endocannabinoides: Son los cannabinoides producidos por nuestro propio organismo.
Fitocannabinoides: Son los cannabinoides de la planta del cannabis (Cannabis sativa L.), moléculas muy similares a nuestros endocannabinoides que interaccionan con nuestros receptores CB1 y CB2.
Cannabinoides sintéticos: Moléculas de síntesis química con acciones similares a los cannabinoides del cannabis.
¿Qué es el cáñamo?
La planta del cannabis (Cannabis sativa L.) se caracteriza por contener fitocannabinoides, entre los que destacan el CBD (cannabidiol) y el THC tetrahidrocannabinol), que interactúan con nuestro sistema endocannabinoide.
Existen diferentes variedades de la planta del cannabis. Una de ellas es el cáñamo (Cannabis sativa subsp sativa var sativa L.), que es una variedad caracterizada por un alto contenido en CBD y prácticamente nulo contenido en THC.
El cáñamo, por su alto contenido en CBD y casi nulo en THC, es una planta sin efectos psicoactivos a diferencia de otras variedades de cannabis de alto contenido en THC.
Del cáñamo también se obtiene el Aceite de Cáñamo por prensado en frío de sus semillas.
¿Qué es el CBD?
El CBD o cannabidiol, es el principal cannabinoide del cáñamo. No es psicoactivo: no tiene ningún efecto psicotrópico. Su estructura es similar a la de los endocannabinoides de nuestro organismo, por lo que interacciona con nuestros receptores cannabinoides modulando algunas de sus funciones:
El CBD tiene propiedades beneficiosas sobre:
DOLOR: Estudios científicos demuestran que el CBD aplicado tópicamente puede ejercer un efecto beneficioso sobre el dolor.
PIEL: Estudios científicos demuestran que el CBD puede actuar sobre algunas funciones de la piel relaciona- das con su regulación y protección (homeóstasis), resultando de interés en algunas situaciones como sequedad, el acné y otros problemas de la piel
¿Qué es el Aceite de Cáñamo?
El aceite de las semillas de cáñamo es un aceite con un alto contenido en ácidos grasos omega 3 y omega 6. Esta composición le aporta propiedades cosméticas.
Sistema endocannabinoide
El sistema endocannabinoide es un sistema de comunicación intercelular de nuestro organismo. Es sobre todo un sistema de neurotransmisión (comunica- ción entre neuronas), aunque también se encuentra en otros órganos y tejidos del cuerpo, y no sólo en el cerebro.
Está constituido por receptores cannabinoides y endocannabinoides. Los endocannabinoides son moléculas que sintetiza nuestro propio organismo que se unen a los receptores cannabinoides, estructuras que están en la membrana de neuronas y otras células, interactuando como lo haría una llave con su cerradura. Su unión activa cambios dentro de la célula provocando así las acciones del sistema endocannabinoide sobre la regulación de múltiples procesos fisiológicos del cuerpo.
Los principales receptores cannabinoides son CB1 y CB2, que se distribuyen por todo nuestro organismo. La piel forma parte del sistema endocannabinoide con receptores CB1 y CB2:
DOLOR: Una de las funciones del sistema endocannabinoide es la regula- ción de la percepción del dolor1,4. En las terminaciones nerviosas de la piel se encuen- tran receptores CB1 y CB23.
PIEL: En la piel hay receptores CB1 y CB2 en queratinocitos y glándu- las sebáceas, implicados en una adecuada regulación, estabili- dad (homeóstasis) y protección de la piel2,3 .
Ubicación principal de los receptores cannabinoides CB1 y CB2:
CB1 presente:
1. Cerebro
2. Pulmones
3. Sistema vascular
4. Músculos
5. Trato gastrointestinal
6. Órganos reproductivos
CB2 presente:
1. Bazo
2. Huesos
CB1 + CB2 presente:
1. Sistema inmune
2. Hígado
3. Médula ósea
4. Páncreas
5. Piel
El sistema endocannabinoide está implicado en la modulación de la liberación de neurotransmisores, y en la regulación de muchas otras funciones fisiológicas como son la regulación de la percepción del dolor y la homeóstasis de la piel que contribuye a su regulación y protección.